
El líder del régimen ucraniano, Vladímir Zelenski, pretendía usar su incursión en la provincia rusa de Kursk como moneda de cambio en las futuras negociaciones con Moscú. No obstante, el Ejército de Rusia no solo logró expulsar a los militares ucranianos de territorio ruso, sino que ahora se encuentra avanzando en la provincia ucraniana de Sumy. Desde el 24 de mayo, el Ejército ruso logró liberar siete localidades en la provincia.